La precipitación de capitular

Movimientos bajistas como los sucedidos en semanas como la pasada (el índice Nasdaq cayó en una sesión un -5%, mayor caída diaria en varios años), llevan con frecuencia a muchos inversores a lo que se denomina «capitulación» o venta de posiciones de riesgo (renta variable, normalmente) ante la  imposibilidad de aguantar el chaparrón bajista  y en la creencia de que el desastre puede ser mayor y la recuperación imposible. 

Gracias Mrs. Truss, ¿por qué no en la UE?

Ha coincidido la llegada de la nueva de Primera Ministra en Reino Unido con el fallecimiento de la Reina Isabel II. Liz Truss ha protagonizado el último acto oficial de la longeva y admirada monarca y ya ha comenzado a actuar como líder de un gran país que, con sus virtudes y miserias, como todos, creo que va a liderar la salida de la crisis que estamos viviendo en Europa y recuperará momentos de brillantez para la economía británica.

Qué hacer tras Jackson Hole

El pasado fin de semana tuvo lugar la reunión de Jackson Hole con los grandes banqueros centrales del mundo, académicos, ministros de finanzas y algunos directivos de grandes empresas privadas. Se juntan cada año para  debatir sobre la situación de la economía global y los retos a los que se enfrenta. Aunque, en general, su contenido y consecuencias son bastante improductivos, esta reunión era especialmente relevante por lo que dijera Jerome Powell, Presidente de la Reserva Federal (Fed).

3 pautas de inversión para el verano

Con vistas al mes de agosto surgen con frecuencia las preguntas sobre qué hacer durante esta fase  históricamente más volátil  en el periodo estival. A pesar de que mucha más volatilidad de la que ya acumulamos en el año es, a mi juicio, difícil que veamos, conviene recordar algunas de las pautas de inversión más útiles para estos momentos en los que la inflación y los bancos centrales son protagonistas y las tensiones geopolíticas y la recesión amenazan permanentemente. 

Recesión o no, qué lo determina

En medio del debate sobre si habrá o no recesión o incluso si estamos o no ya en ella, los mercados de acciones y de bonos han cerrado su peor primer semestre en décadas. Subyace una temida realidad que va más allá de la semántica académica (PIB se contrae durante dos trimestres consecutivos) y del suplicio del inversor que ve reducirse la valoración de su cartera. Me refiero al  verdadero dolor económico y psicológico  que un período verdaderamente recesivo causa en la ciudadanía. Por ello, creo que se hará todo lo posible por que no llegue demasiada sangre al río. Los políticos quieren salir reelegidos y los técnicos dependen de ellos. Pero veamos los datos y que cada uno juzgue. 

Dolor en los mercados: ¿hasta cuándo?

En esta tormenta de caídas e incertidumbres que atraviesan los mercados, hay algo de lo que podemos estar seguros: los niveles de inflación seguirán altos durante los próximos años y la política de tipos de interés al alza para frenar las subidas de precios impulsada por los bancos centrales acabará por frenar la economía. Aquí surge la gran duda: ¿cuánto va a frenarse y hasta qué punto va a continuar el impacto negativo en los mercados?

Qué esperar de la economía USA y de su Bolsa

Los mercados tienen cada vez más dudas  sobre qué podemos esperar del crecimiento de la economía global en los próximos trimestres: inflación aparentemente desbocada, miedo a que las alzas de tipos de interés no frenen las subidas de precios y estrangulen el crecimiento, los costes de la energía manteniendo su tendencia alcista…  La guerra en Ucrania y el cierre de China por ómicron han enturbiado todavía más el panorama. De hecho, el presidente  Powell  (Fed) admitió recientemente que el hecho de que se produzca o no un aterrizaje suave de la economía es cada vez más incierto y que subirán tipos hasta tener evidencias  «claras y convincentes»  de que la inflación afloja. De ahí que sea un momento oportuno para analizar lo que puede pasar en la Bolsa americana desde el punto de vista fundamental – crecimiento de beneficios y tipos de interés – y hacerlo con la información de la que disponemos en estos momentos. De ese mercado dependerá en gran medida lo que suceda en nuestro entorno bursátil más cercano. 

Buscando refugio: ¿hay alternativa?

La primera semana de mayo ha sido un buen ejemplo del tormentoso entorno en que se están moviendo las economías en Occidente: inflación aparentemente desbocada, miedo a que las alzas de tipos de interés no frenen las subidas de precios, el riesgo de recesión en el horizonte cercano… De ahí que viéramos cómo el pasado jueves el optimismo tras las palabras de Powell (FED) durara apenas una sesión y las  bolsas retomaran las caídas  lideradas por el sector tecnológico. Y ello a pesar de que  los resultados en agregado tanto en Estados Unidos como en Europa están siendo positivos con sorpresas al alza que alcanzan el +4% y el +10% respectivamente. Difícil contexto para los inversores más conservadores/prudentes que buscan refugio para sus carteras.  

RF de EEUU, ¿la inversión del año?

Recordando lo que escribía en este blog hace unas semanas, el inicio del año 2022 para los precios de la renta fija de EEUU es probablemente el peor de la historia desde la Segunda Guerra Mundial. El bono del tesoro americano a 10 años acumula  pérdidas de aproximadamente el -8%  y todavía no han transcurrido los cuatro primeros meses de este infausto ejercicio para los mercados de bonos y acciones globales. En la citada columna de principio de mes, citaba varias formas de aprovechar ahora la renta fija. En general, todas están funcionando bien en este mes de abril y alguna, como es el caso de la renta fija estadounidense, ha mejorado el momento de entrada en sus plazos largos.