La tendencia bajista de Trump

Muchos comienzan a poner en duda la fortaleza de la expansión económica mundial ante la amenaza de una guerra comercial internacional. Por ello, vista la incertidumbre creada por las decisiones del Presidente Trump, los mercados de acciones están reaccionando con caídas y podrían seguir haciéndolo hasta que puedan cuantificarse las verdaderas consecuencias de las tensiones creadas. ¿Estamos ante el comienzo de un mercado bajista en Bolsa ligado a un giro hacia la “desglobalización”.

¿Será el 2T bueno para las bolsas?

Tras el peor primer trimestre en Bolsa de los últimos dos años, los inversores se plantean si los indicios de desaceleración de las economías europea y japonesa que podrían estar reflejando las caídas en los índices de confianza empresarial pueden convertirse en catalizador de más caídas de la Renta Variable. Pese a los recientes descensos de las Bolsas estadounidenses ante el temor a que la guerra comercial degenere en cataclismo para la economía global, creo que el segundo trimestre que ahora comienza puede ser un período favorable para los mercados de acciones y explicaré las razones en las que apoyo tal afirmación.

¿Vendo Bolsa o aprovecho las caídas?

Las crecientes tensiones comerciales entre Estados Unidos y China están provocando fuertes caídas en las Bolsas. Muchos nos planteamos si esta incipiente guerra comercial puede ser el catalizador que frene la favorable evolución de la Renta Variable en Estados Unidos que ya acumula nueve años y si ello puede contagiar a Europa y al resto del mundo como parece está haciendo durante las pasadas semanas.

¿Es cierto el riesgo por China?

En lo que a fuentes de riesgo se refiere, la atención de los mercados financieros ha estado centrada durante los últimos meses en los Estados Unidos. El twitter del Presidente Trump y los movimientos de tipos de interés de la FED están siendo los catalizadores de volatilidad. Parece que China y sus aparentes desequilibrios macroecomómicos han pasado a un segundo plano. ¿Debemos estar tranquilos con la evolución de la primera potencia comercial e inversora mundial? No lo creo, pero tampoco inquietos innecesariamente pues algunos de los planteamientos negativos que con frecuencia se hacen sobre el gigante asiático deben ser matizados.

Optimizando la parte conservadora de una cartera

Los recientes episodios de volatilidad en los mercados financieros, inacabados seguramente, han dejado buena muestra de la importancia de la parte más conservadora de las carteras de inversión. El hecho de que el mercado monetario no proporcione retorno alguno, o incluso éste sea negativo, y que la renta fija tradicional se sitúe en sus distintos plazos a tipos bajísimos, no debe ser óbice para que un inversor cuente con activos que puedan compensar la rentabilidad global de un portfolio en momentos en que se producen caídas en Bolsa y en bonos con duraciones superiores a 2 – 3 años, como ha sucedido durante las últimas semanas. Existen alternativas de inversión que pueden actuar de “paracaídas” para suavizar estos movimientos adversos del mercado y a continuación citaré brevemente dos de ellas que se canalizan a través de fondos de inversión.

Caídas en Bolsa y riesgo político

Es innegable que el entorno socioeconómico y político en el que se mueven las empresas condiciona su evolución bursátil. El reciente episodio del Presidente Trump amenazando con aranceles a determinadas exportaciones a EEUU (acero, aluminio y automóviles europeos) es buen ejemplo de ello. Los mercados acostumbran a sobrerreaccionar en el corto plazo para, al cabo de unos días o semanas, normalizar su comportamiento (v.gr. Brexit). No obstante, ahora nos enfrentamos a riesgos políticos en varios frentes.

FI mixtos flexibles: seleccionar los mejores

Los fondos de inversión de tipo mixto son una de las grandes herramientas de inversión para muchos españoles que soportan con dificultad la volatilidad propia de los fondos direccionales ligados a un único tipo de activo, especialmente si éste es la renta variable. En momentos de fuertes caídas de los mercados de bonos y acciones, como los vividos durante el mes de febrero, se demuestra la efectividad de la estrategia de gestión de un fondo de inversión de este tipo, sobre todo si al término mixto se incorpora el de flexible. La cuestión es elegir bien y aquí voy a exponer los criterios que considero más adecuados para ello.

Oportunidades tras las caídas

Tras las caídas de la primera parte de febrero, la Bolsa europea sigue siendo la inversión preferida para 2018, máxime una vez avanzada la temporada de resultados empresariales que se han mostrado mayoritariamente favorables. Más allá de la necesaria revisión de valoraciones de algunas compañías que refuerza la conveniencia de un enfoque de gestión activa no ligada a índices, existen algunos tipos de activo que han reactivado o incrementado su atractivo como elemento de diversificación de carteras. Me centraré en tres de ellos.

Tres gráficos para entender dónde están las Bolsas

Durante las dos últimas semanas he podido leer más de veinte análisis de distintas casas de gestión sobre las caídas de las Bolsas. Prácticamente todos, incluido el de mi empresa iCapital, coinciden en lo principal: los indicios de futura inflación en EEUU y cierto tensionamiento de la curva de tipos de interés en Estados Unidos han provocado una cadena de ventas cuya dimensión se ha visto acrecentada por elementos técnicos (órdenes robotizadas) y por el exceso de complacencia (la volatilidad estaba en mínimos) y las elevadas valoraciones de algunos segmentos del mercado. No voy a profundizar de nuevo en ello y voy a limitarme a exponer tres gráficos que muestran que la situación de los mercados de acciones no debería de deteriorarse mucho más allá de lo que hemos visto.

Apuntes para el 2018

Las economías globales esperan un desarrollo tan bueno para este año como en 2017.
Estados Unidos vive su segundo ciclo económico más largo desde la Segunda Guerra Mundial y aunque es difícil definir su duración, poco a poco nos acercamos al final.
En este entorno debemos plantearnos reducir el riesgo global de las carteras, lo que es una difícil decisión en un entorno próspero que invita a relajarse y disfrutar del momento.