Falso default, ¿engaño a inversores?
No he querido escribir hasta ahora del famoso debt ceiling o techo de deuda, que así se denomina el límite de gastoque normativamente se autoimpone el Gobierno de Estados Unidos confiando en que se lograra solucionar. Sin embargo, más allá del debate político y financiero, puede convertirse en una realidad dentro de unos días (el 1 de junio próximo) y muchos americanos dejarán de recibir pagos desde la Administración y cualquier tenedor de bonos públicos americanos, treasuries, podría no cobrar sus cupones ni amortización de principal. Parece serio. A mi juicio, sólo parece, pues, como dicen los anglosajones, en todo esto hay más humo que fuego.