De la Desesperación a la Complacencia

Desde Julio de 2013 hemos vivido una caída ininterrumpida de las primas de riesgo en el área Euro. ¿Realmente son los niveles actuales coherentes con el riesgo real que tienen unas economías con un nivel de deuda mucho más abultado que antes de la crisis, unos cuadros macroeconómicos claramente deteriorados y una recuperación tan lenta y como dudosa?

Parece que el homo sapiens no puede sino caer una y otra vez en el mismo error de pasar del pánico a la euforia y de la desesperación a la complacencia.

Cada vez que veo las cotizaciones de la renta fija soberana de todos los emisores, los teóricamente fuertes y los teóricamente débiles, no puedo dejar de temer que estamos de nuevo ante una sobrevaloración de un activo clave. En fin. Los mercados mandan.