Archivo por meses: febrero 2016

Emergentes: ¿oportunidad de inversión o riesgo excesivo?

La conclusión de este post es positiva: existe potencial de revalorización en algunos ME y su inclusión puede compensar riesgos y ampliar favorablemente los beneficios de la diversificación de una cartera de renta variable. No estamos ante un activo para cualquier inversor pues el riesgo es alto, pero la recompensa potencial también es elevada.

Entre los mercados preferidos de muchos gestores de ME están India y Turquía. Los peor vistos, Brasil y Sudáfrica. No obstante, no hay un consenso evidente y la diversidad de posibilidades de exposición es enorme. De ahí que la consulta a un asesor especializado sea una de las condiciones sine qua non previas a cualquier toma de posición. El otro requisito para invertir, el pesimismo y el descuento en el precio, parece que ya se cumple en algunas compañías y zonas geográficas entre los ME.

Entorno de guerra y reglas para el sosiego

Cuando se producen movimientos de las cotizaciones como los que estamos viviendo en 2016, la mayoría de inversores se pregunta por qué nadie les avisó y qué pueden hacer ahora. Sobre esto último escribía el pasado martes en Expansión en su edición en papel bajo el título ¿Qué hacer ante los desplomes?. Ahí resumía las pautas que considero imprescindibles para afrontar con garantías este volátil y belicoso entorno de mercado. Desde entonces, creo que se ha profundizado en el principal problema de esta crisis que afecta a las bolsas y a otros activos financieros y que es el siguiente: no acabamos de entenderla.

Euribor 12m negativo: ¿me pagarán por mi préstamo?

El Euribor negativo es otra muestra de la fase de miedos y dudas sobre la evolución de la economía global que estamos atravesando. Ahora más que nunca, son los políticos quienes deben actuar tomando medidas que promuevan la confianza y facilitando un marco legal que afiance el débil crecimiento logrado. Estamos viviendo un momento trascendental dentro del proceso de salida de esta indómita crisis que todavía nos somete. Y mientras, en España, jugando con fuego.

Los mercados en febrero: 3 dudas y 2 certezas

Ante un escenario como el descrito con elevadas incertidumbres y con certezas que tienen cada vez menor seguridad en sus resultados finales, conviene que:
Adaptemos el riesgo de nuestras inversiones a lo que realmente nos podemos permitir, incluso si ello comporta asumir pérdidas.
Vigilemos la evolución de los beneficios empresariales (estamos en plena época de publicación de resultados) ya que deben determinar el enfoque de exposición a bolsa de la cartera.
Y, una vez hecho todo lo anterior, esperemos sin nervios, pues el mundo, de eso sí que estoy seguro, no va a desaparecer mañana.